ANÁLISIS | Arrow S07E12: Emerald Archer (Spoilers)

cumple y dignifica. El show insignia del universo superheroico televisivo de The CW celebra su episodio número 150 con un formato muy particular, un presente cargado de significado para este grupo de justicieros y un futuro abierto a todas las posibilidades con nuevos personajes a la cabeza. ‘Emerald Archer’, dirigido por Glen Winter -realizador habitué del Arrowverse que tiene su propia referencia dentro de este capítulo, junto al nombre de David Nutter-, transforma este hito de la TV en un pseudo documental sobre los héroes de Star City y alrededores. Mejor dicho, sus vigilantes, ya que todavía no queda muy claro para qué lado de la ley juegan estos individuos en spandex.

El título del episodio 150 hace referencia al documental en cuestión: ‘Emerald Archer’: The Hood & the Rise of Vigilantism’ (El Arquero Esmeralda: La capucha y el ascenso del vigilantismo) –narrado por Kelsey Grammar-, un film que intenta encontrar las respuestas sobre si estos justicieros son verdaderos héroes o villanos. Para mantener las relaciones públicas en buenos términos, y la transparencia entre la colaboración de Oliver Queen y el departamento de policía de Star City, ambos acceden a ser perseguidos por la directora (Jessica Heafey) y sus camarógrafos en cada instancia del día a día de la investigación. A esto hay que sumar las entrevistas personales, y viejos testimonios de allegados al Team Arrow como Quentin Lance (Paul Blackthorne), Thea Queen (Willa Holland), Sara Lance (Caity Lotz), Cindy ‘Sin’ Simone (Bex Taylor-Klaus), Rory Regan/Ragman (Joe Dinicol), y hasta el mismísimo Barry Allen (Grant Gustin), en carácter de investigador de Central City, obvio.

‘Emerald Archer’ arranca con el logo y la clásica musiquita de Warner Bros. -porque si lo hacemos, lo vamos a hacer bien- y desde ese momento entendemos que este será un capítulo especial, visto bajo la ‘lente’ (literal) de estos documentalistas, pero también de los planteaos que el show y sus protagonistas se vienen haciendo desde hace siete temporadas: el deber, la legalidad, los errores cometidos, los sacrificios que ello implica, la evolución de un personaje que nació de la venganza, entendió el verdadero significado de justicia al calzarse la capucha y el abrazó la importancia de confiar y el trabajo en equipo.  

 data-height=
Luz, cámara, acción

Sí, todo esto lograron meter Winter y los guionistas Marc Guggenheim y Emilio Ortega Aldrich en 44 minutos de tele, sumando un tipo de humor que no suele exponer la serie del arquerito y un corazón que nos recuerda por qué amamos a estos personajes a pesar de sus múltiples fallas delante y detrás de las cámaras. El episodio 150 es un regalo para los fans que estuvieron ahí desde el comienzo, no sólo por sus incontables referencias a estos siete años que ya pasaron, sino porque resume el espíritu de este universo superheroico que tiene a Oliver Queen como su Jedi Master

Mientras las cámaras siguen a Ollie y compañía, la ciudad se enfrenta a un nuevo enemigo que parece querer acabar con los vigilantes, incluso más que la alcaldesa Emily Pollard (Laara Sadiq) y sus leyes prohibitivas. La señora sigue viendo con malos ojos el nombramiento de Queen, y piensa llegar hasta las últimas consecuencias para mantener a los justicieros fuera de las calles y, posiblemente, tras las rejas.

Quimera es el villano de turno, gustoso de cazar vigilantes –incluyendo a Emiko Queen, la NGA (New Green Arrow)-, apenas una mera excusa narrativa para que Diggle, Curtis y Rene decidan volver a ensamblar al Team Arrow, aunque esto implique terminar en prisión. La unión hace la fuerza y estos amigos están dispuestos a arriesgar su propia libertad, como ya lo hizo Oliver, para ayudarlo a recuperar a su hermana y evitar que se convierta en el próximo blanco de este antagonista.

 data-height=
Hay equipo

Al final, los buenos salvan el día y atrapan a este groupie con ganas de coleccionar suvenires, pero la ley anti vigilantismo está por encima de todo y ahora deberán afrontar las consecuencias. O no, porque Pollard se da cuenta que, a veces, la ley necesita un poquito de ayuda y que para combatir a tipos como Ricardo Diaz, Damien Darhk o Slade Wilson, la ciudad necesita de sus verdaderos justicieros.

Esto abre un montón de posibilidades para el resto de la temporada y más allá (porque ya tiene una octava entrega asegurada). No necesariamente quiere decir que volveremos a ver al Team Arrow en acción cada semana, pero sí la probabilidad de juntarse con más frecuencia sin tener el peso de la ilegalidad en sus espaldas. Diggle y Curtis seguirán con sus tareas en ARGUS, Rene ayudando a Emiko a encontrar al asesino de su madre, y Oliver haciendo malabares entre sus incursiones justicieras y sus responsabilidades como marido y padre.

Lo de William (Jack Moore) quedó un poco descolgado, pero también tenemos que entender como este presente repercute en el futuro que nos muestran los flashforwards, el nuevo artilugio narrativo de esta temporada, mucho más interesantes que los constantes viajecitos a Lian Yu. Los problemas escolares del pequeño Clayton se vienen a sumar al reciente descubrimiento de Oliver sobre Emiko y el pasado de su papá, un secreto que decide empezar a compartir en esta nueva etapa de su vida.

 data-height=
El arquero siempre a la cabeza

‘Emerald Archer’ termina con Oliver y el equipo de filmación visitando la destruida arrowcueva, pero inmediatamente nos damos cuenta que estamos ante ‘otra película dentro de la película’, ya que hay alguien tomando nota de estos datos que se pueden ver en el documental, aparentemente, prohibido hace muchos años. La chica en cuestión es Mia (Katherine McNamara), un nuevo personaje salido de los cómics –Mia Dearden, conocida como la segunda Speedy después de Roy Harper-, que acá hace equipo con Connor Hawke (Joseph David-Jones), un crecidito John Diggle Jr. (hijo de John y Lyla a partir de Flashpoint) al que ya vimos en ‘Star City 2046’, episodio de  ‘Legends of Tomorrow’ ambientado en una Star City distópica. Ambos también hicieron yunta en las páginas de las historietas, pero veremos que les tienen reservados la showrunner Beth Schwartz y compañía.

No nos queremos adelantar a los hechos porque este episodio es demasiado bueno y se merece disfrutarlo sin hacer conjeturas anticipadas. Por ahora nos quedamos con esta ‘tabula rasa’–no tanto para los personajes que aprenden de sus fallas y errores, sino para la serie que cierra una etapa y abre la puerta a un ¿nuevo comienzo?- que sigue demostrando porque el universo superheroico de The CW no para de crecer, ahora casi dándole la bienvenida a Gotham y su Batwoman de manera oficial.

Los dilemas morales de Ollie, las sabias palabras de Diggle, la importancia de los personajes femeninos cada vez más influyentes, la solemnidad nolaniana y la ciudad y sus habitantes como la eterna damisela en peligro… ‘Arrow’ construyó un universo a partir de estas premisas y sus personajes, y ‘Emerald Archer’ es su perfecto auto homenaje. Tal vez no tan perfecto, al igual que sus protagonistas a los que se los quiere desde que Ollie fue rescatado de una isla.

 data-height=