Análisis | Felix The Reaper mezcla puzzles y aventura

Si pensamos en aventuras que nos llevaron a conocer a la muerte misma, la única que se nos viene a la mente es la imperdible Grim Fandango. Por esta razón, la historia de Felix The Reaper nos atrapa desde el principio, porque su protagonista siniestro y simpático por igual se siente distinto. El estudio detrás del proyecto, los nórdicos de Kong Orange, pusieron mucho amor en la presentación del juego, especialmente en el arte y su soundtrack. Sin embargo, bien sabemos que con las apariencias no alcanza, y es que detrás de esta cáscara se encuentra un jugo de puzles que podría dar más de sí.

Los niveles tienen una cámara dinámica que nos deja ver a Felix desde todos los puntos de vista

Felix The Reaper no es un título que se haya anunciado con bombos y platillos. Se trata de un juego que se estrena en Xbox Game Pass y por ello hay muchos jugadores pendientes de él. Lo cierto es que es uno de esos juegos que nos capturan de inmediato en términos visuales. Derrocha personalidad por todos sus polígonos.

La premisa narrativa no es menos atractiva. Nuestro protagonista es Felix, un sesgador, es decir, un emisario de la Parca, que trabaja en el Ministerio de la Muerte. El tipo se dedica a completar los encargos que le mandan, algunos grotescos, otros no tanto, aunque en general tienen que ver con asegurar la muerte de alguien.

Felix tiene todo el carisma y le da el encanto a la banda sonora

Por todo lo mencionado hasta acá, los primeros compases de Felix The Reaper son magníficos. Nos presenta un sistema de puzles en una especia de maqueta 3D. Nuestro personaje se posiciona en cuadriculas y solo puede avanzar por las zonas oscuras, si la luz del sol lo toca estaríamos dando un movimiento en falso y la acción se deshace. La idea es abrirnos camino por las sombras, girando y cumplir el objetivo del nivel, que puede ir desde planear un asesinato como si fuese accidental o tareas más superfluas como cargar piedras en una catapulta.

Acá es donde se deja ver el costado agridulce del juego. Jugar Felix The Reaper nos captura por la personalidad de nuestro personaje, que se mueve por el tablero como un verdadero bailarín. Las animaciones son increíbles: el protagonista se mueve con la simpatía de los dibujos animados clásicos al compás de una banda sonora canchera. Pero admiramos todas estas proezas estéticas a costa de un diseño de niveles repetitivo y misiones menos inspiradas que otras. De hecho, muchos niveles terminan siendo una decepción por el espacio desaprovechado. Hay muy pocos objetos interactivos o incentivo para explorar.

Algunos niveles dicen muy poco

A medida que avanzamos, comienza a notarse el trasfondo de desarrollador mobile que tienen los creadores de Felix The Reaper. Los niveles que en un principio parecen diseñados a mano con amor y sesos, terminan siendo poco inspirados, aburridos, y hasta reducidos a mover cajas, rocas y barriles. No es lo que uno espera de un juego con la premisa de controlar a la Parca. Menos después de las cinemáticas impactantes, tipo comic, que introducen cada nivel.

El título termina siendo un juego de puzles casual en el sentido más más genérico de todos. Un juego en el que no cuaja su narrativa y su presentación artística con su propuesta jugable. Al final es un compendio que prioriza la cantidad de niveles por sobre la calidad, una filosofía de diseño que suele funcionar con los juegos mobile casuales, pero que se queda cortísima ante las expectativas que generan la historia y sus personajes.

Felix The Reaper tiene ideas muy diferentes a los juegos de puzles que vemos todos los días, pero no termina de ejecutarlas del todo bien. Algunos niveles están más inspirados que otros, no solo en el reto que implica el puzle, también en lo visual y sonoro. Si bien es cierto que el arte del juego nunca deja de sorprendernos, puede volverse aburrido recorrer cinco niveles al hilo con el mismo fondo.

A muchos de ustedes les va a gustar Felix The Reaper. Si bien es un juego que no es sincero consigo mismo y nunca se entiende si quiere ser narrativo o simplemente un despliegue desafiante de puzles, los amantes del ingenio puro encontrarán un reto desafiante. Simplemente echamos de menos que todo el amor estético que tiene encima no sea más que una máscara.

FELIX THE REAPER

17/10/2019 (PC, PS4, XBOX ONE, SWITCH)
5.5

Las 4 horas que pasé con Felix en PC fueron un tire y afloje entre intentar amarlo, como me pedía su apartado audiovisual, y largarlo por completo. Me decanté por lo segundo. Sinceramente, me aburrió. El juego fue provisto por el desarrollador.