Los juegos anuales de deportes muchas veces son difíciles de analizar por la dificultad que presenta mostrarse año a año. Sin dudas F1 23 no viene a revolucionar los simuladores de carreras pero si es una excelente propuesta para todas las audiencias y el intento positivo de alejarse del nicho de la mano de Braking Point 2.
Cuando era chica me levantaba todos los domingos con la tele de la cocina a todo volumen mientras mi papá, muy fan del automovilismo, preparaba el mate para ver tanto TC como F1. En mi curiosidad le preguntaba sobre absolutamente todo lo que estaba pasando en pantalla a la vez que esperábamos a mi mamá para almorzar mientras mirábamos el podio. Durante 18 años esto fue una rutina en mi familia, y esta fue mi relación con las competiciones de coches hasta que hoy, después de 20 años, me toca agarrar el volante virtual y contarles qué pasa en las pistas de F1 23.
Entonces, un desafío que presentaba para mí esta nueva entrega anual de F1, era cuán amigable podía ser con nuevos usuarios como lo soy yo, a la vez que equilibraba su contenido con los expertos de la materia. Las entregas anuales de videojuegos de deportes suelen presentar muchas veces problemas en este balance, a la vez que buscan constantemente innovar edición tras edición. Tarea compleja, considerando que esta innovación muchas veces está atada a lo que pasa en las ligas en el mundo real, al mismo tiempo que un equipo de desarrollo corre contra reloj para llevar la mejor experiencia posible al usuario.
F1 23 cuenta, nuevamente, con el desarrollo de la gente de Codemasters bajo el ala de EA Sports para PC y ambas generaciones de consolas, tanto para PlayStation como Xbox con una base sólida respecto al realismo de la simulación que propone. Sinceramente, no necesitaba mayores cambios (aunque los tiene), pero aún así debía ofrecer una experiencia superadora a su predecesor, el F1 22, que motive a realizar la inversión de quien, año a año, por fanatismo, apuesta a estos juegos de deportes.
La Fórmula 1 es un deporte de nicho y no tiene el peso global (o local) que el fútbol, pero es innegable que su popularidad en el público casual haya aumentado en los últimos tiempos, y en gran parte esto se debe a la existencia de documentales como Drive to Survive en plataformas masivas como Netflix, donde se nos muestra, año a año, desde el 2019, qué sucede tanto en las pistas como en los boxes de los equipos. Apelando a lo puramente humano de la pasión, amistad, rivalidades y conflictos, este formato es tan exitoso que lo veremos dentro de F1 23 de la mano del triunfal regreso de su modo historia Braking Point 2 después de su ausencia en la edición de 2022.
Con una navegación simple en menús y buenas opciones de accesibilidad, tendremos una diversidad de modos de juego a nuestra disposición en la pantalla inicial. Pero primero vamos a adentrarnos un poco más en la propuesta de su modo historia, ya que no solo es la gran diferencia del año anterior sino que realmente es, en mi experiencia personal, el aspecto más destacable y superador con respecto a otros relatos deportivos como lo son “The Journey” en FIFA o “MyCAREER” en NBA 2k.
Con una muy buena dirección general, Braking Point 2 regresa para continuar con la historia de Aiden Jackson, ahora parte de la escudería ficticia llamada Konnersport, quienes tienen la necesidad de continuar siendo rentables y respetables a pesar de la mala suerte con la que cuentan en las pistas con sus autos. Para agregarle un extra de drama, se suma al equipo nuestro enemigo principal Devon Butler, quien además es el hijo de nuestro mayor inversionista. Cuál telenovela, el modo historia cae en todos los clichés posibles, pero Codemasters sabe como ejecutarlo para que funcione a la perfección a la vez que lo presenta como un documental con declaraciones de los involucrados sobre los eventos que vamos viviendo. Sin dudas, puede sonar simple pero es increíblemente efectivo para contarnos una historia que nos motive a la hora de entrar a las pistas en busca de objetivos, como por ejemplo, tener que sobrepasar a nuestro insoportable compañero que no quiere ceder su lugar, aunque eso implique el fracaso del equipo completo.
En esta modalidad cumpliremos, como mencione, objetivos puntuales en cada carrera en base a lo que está ocurriendo con nuestra escudería y algunos extras para sumarle al rendimiento y la reputación, dos elementos claves que se subirán de nivel e irán variando a medida que tomemos las decisiones correctas para el equipo tanto fuera como dentro del circuito y con distintos personajes. Entre carreras tendremos la posibilidad de ver nuestras redes sociales, recibir emails, y otras acciones por el estilo, mientras disfrutamos de cinemáticas muy bien trabajadas. Spoiler alert: respecto a la historia, a lo largo de 20 capítulos, Aiden no será el único personaje que podremos manejar y gracias a esto le sacaremos el máximo provecho a la propuesta, así como a las licencias que posee Codemaster de Fórmula 1 y Fórmula 2.
Realmente hay un buen storytelling y merece ser destacado en esta reseña, porque como comente anteriormente, el volver a ingresar a un juego de simulación después de muchísimos años, o como novato, se puede sentir imposible. Pero las opciones de ayuda y los diferentes niveles de dificultad de F1 23 hacen que el camino sea más fácil y la experiencia personal sea muy satisfactoria sin caer demasiado en la frustración. Si necesitamos comenzar de cero, el modo fácil tiene un desarrollo mas fiel a lo que sería un arcade y, de esa forma, tenemos ciertas guías que nos ayudan a entender mejor las pistas y los controles, pero no se confundan: el desafío es real y el juego es exigente con el usuario. Las funciones de los gatillos hápticos tienen una buena respuesta respecto a cómo se debería sentir nuestro monoplaza, e intuitivamente iremos aprendiendo a controlar mejor nuestro automóvil. Eso sí, los saltos en las dificultades son sustancialmente notorios y podremos modificar nuestro modo de juego a gusto para dar la experiencia de simulación más fidedigna posible a la realidad.
No habiendo jugado la entrega anterior, es un poco difícil comparar ambos juegos como producto final, pero en este caso, la conducción sí se siente placentera y gratificante, con una respuesta general del coche intuitiva gracias al implemento de la tecnología de “Precision Drive”. Nuevamente, amigable con los nuevos usuarios y con mejoras sustanciales en las físicas de los autos, acercándose a un mayor realismo sin ser en exceso benevolente con el jugador. El abanico de posibilidades es realmente amplio y podremos ajustar el modo de juego acorde a nuestras necesidades. F1 23, en su base, es una gran propuesta como simulador de carreras y, además, busca ser versátil teniendo en cuenta de que estamos hablando de un juego anual deportivo que muchas veces caen en la repetición año a año.
Dentro de otros modos tendremos también el F1 World que reemplaza lo que fue F1 Life de la entrega pasada. Será el espacio donde la recompensa de loots al completar desafíos y competencias, cobrará vida. Con el agregado de una plataforma social para englobar al multijugador, que por cierto, continúa siendo crossplay. Esto funciona un poco como pase de batalla y habrá desafíos puntuales diarios y semanalmente. A todo esto, el modo carrera se ejecuta como el año anterior, donde podremos crear nuestro piloto y decidir si atravesamos la competición orgánica comenzando en Fórmula 2, y buscando nuestro mejor fichaje de cara a la categoría mayor, mientras disfrutamos de las nuevas pistas del 2023, como Qatar o el circuito competitivo de Las Vegas. Destacable el uso de la I.A. donde no encontré problemas en la respuesta de los coches competidores, ni choques ilógicos o situaciones dudosas.
La pregunta para mí, cuando comencé a jugar, era si realmente me iba a atrapar más allá de la curiosidad de experimentar el mundo de las simulaciones de la nueva generación. La respuesta fue, sorpresivamente, positiva de mi parte. No solo la experiencia de juego es muy digna, sino que la propuesta de Braking Point 2 me encantó. Falta nivel técnico de mi parte para analizar algunos aspectos de manejo que generalmente los da la experiencia, pero si no sos un conocedor o no tenés experiencia en el género, vas a entender mi mirada con ojos frescos de cara a F1 23. Destacable modo historia, destacable manejo y una mejora importante en el realismo general, incluso a nivel cinematográfico con lo que respecta al gameplay, donde el coche no se siente tan caricaturesco como podría pasar en entregas anteriores. Tal vez se siente mejor pulido el modo historia y un poco descontextualizado el popurrí de opciones que nos ofrece F1 World, pero la entrega en general es sólida y considerando las dificultades que presenta la idea de superarse año a año, es más que aceptable. No revoluciona ni es innovador, pero sin dudas Codemasters y EA Sports traen un simulador de carreras entretenido, sólido y acertado. Si nunca jugaste F1, este puede ser un buen exponente para iniciarte en el género.
PUNTAJE: 8/10
F1 23 fue lanzado el 15 de junio de 2023 para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series y PC y lo jugué durante unas 14 horas en PlayStation 5.