Por más que seamos varios los que argumentamos que quizás la próxima generación de consolas debería tomarse un tiempo más, ya tenemos una fecha concreta para al menos una de estas nuevas máquinas. Igualmente, saber que Xbox Series S sale el 10 de noviembre no significa mucho en este mundo de pandemia donde el paso del tiempo perdió el sentido; esa fecha puede llegar en un parpadeo o tardar una eternidad. Sin embargo, al saber que esta generación tiene “los días contados”, no pude evitar recordar algunas de mis experiencias favoritas y la primera que se me vino a la mente está centrada en una función: el botón Share.
Cuando se presentó la Playstation 4 en febrero del 2013, uno de los anuncios más curiosos tenía que ver con el control. El nuevo Dualshock 4 vendría con un botón que instantáneamente le permitiría a uno tomar capturas de pantalla o video de cualquier juego, para luego compartirlo en redes sociales. Sony, además, apostaba fuerte al streaming y parte del sistema operativo de la Playstation 4 estaba dedicado a poder ver streams de tus amigos de Playstation. Esta idea abría las puertas a los jugadores de consolas a un mundo que se sentía nuevo y, más importante, accesible.
Al principio, durante los primeros años de la Playstation 4, esa función no había terminado de tomar la forma que conocemos hoy en día. Al momento de anunciar la consola de Sony, la única manera de transmitir video era mediante Ustream, un servicio que ya no existe más al menos bajo ese nombre. Unos meses antes del lanzamiento de la Playstation 4 se anunció la opción de poder utilizar Twitch, y un año después llegó Youtube. Para ese entonces ya quedaba claro que el intento de convertir Playstation Network en una suerte de red social gamer había fallado, pero al menos Playstation 4 ya contaba con compatibilidad con los grandes del video en internet, además de Facebook y Twitter.
Así, la posibilidad de compartir momentos de tus juegos favoritos se había convertido en una herramienta democratizada. Tal y como a nivel desarrollo esta generación se caracterizó por el auge del indie gracias a un desarrollo más accesible, la funcionalidad Share le permitió a los jugadores usar funciones que antes eran “exclusivas” de PC, o de personas con hardware específico. La sola idea de sacar una captura de pantalla era un concepto ajeno para los que jugamos únicamente en consola, pero ahora teníamos al alcance de nuestra mano una herramienta nueva y emocionante.
Antes de la llegada del botón Share, conseguir imágenes como jugadores de consola era toda una odisea. Todavía recuerdo mis últimos momentos con Mass Effect 3: Citadel, DLC de aquel gran RPG de Bioware. Llegando al final de la historia, Shepard organiza una fiesta y para terminar las celebraciones el grupo decide sacarse una foto. Como fan acérrimo de Mass Effect, yo también quería mi propia copia de esa foto, pero como jugador de Playstation 3 sin hardware para capturar gameplay me era imposible. Me tuve que conformar con parar mi Shepard frente al televisor gigante de su departamento que muestra la foto, y sacar una foto yo mismo con mi celular. Hoy en día ni esa Playstation 3, ni ese celular, ni la PC donde tenía guardada la imagen existen.
Una cosa que muchos suelen olvidar es que Playstation 4 no fue la primera consola de Sony que permitía capturar imágenes: ese honor le corresponde a la infame Playstation Vita. Sí es cierto que los métodos en aquella consola eran mucho más primitivos. Uno tenía que usar una combinación de botones para hacer una captura de pantalla (video era imposible), pero al tener aplicaciones tanto para Facebook como para Twitter, en la portátil de Sony podía hacerse más o menos lo mismo que en la futura Playstation 4. Todavía tengo en mi PC una carpeta con alrededor de 1300 capturas de pantalla de mi vieja Playstation Vita, ya que esa fue mi introducción a este tipo de función y le exprimí todo el jugo posible.
Lo mismo sucedió con Playstation 4, y no fui el único al que la idea del botón Share le vino como anillo al dedo. Al día de hoy tengo muchísimos GBs tanto de capturas de pantalla como de video, y los usos de esta función son incluso más variados de lo que pensaba en aquel febrero de 2013 cuando se anunció. A veces me resulta conveniente capturar una imagen para no olvidarme una cierta línea de diálogo, o la solución de algún puzzle que hay que resolver varias veces. Cuando me siento a practicar juegos de pelea, a veces grabo repeticiones para luego pasarlas a mi PC y analizarlas frame a frame.
El botón Share cambió tanto la forma de interactuar con nuestros juegos que hasta dio lugar a nuevas funciones dentro de los mismos juegos en sí. Sin el botón Share y su alta accesibilidad, no tendríamos Photo Mode en tantos juegos. Imagino que este tipo de herramientas para hacer lindas capturas de pantalla no deben ser ajenas al ambiente de PC, pero hoy en día es importante que los juegos de consola cuenten con este modo, ya que a muchos nos encanta jugar no solo al juego en sí sino también a construir imágenes que nos permitan expresarnos artísticamente usando nuestros juegos favoritos. No seremos fotógrafos profesionales, pero en cierto punto podemos jugar a serlo.
La nueva generación de consolas va a llegar con el beneficio de toda una generación anterior de gente usando la función Share. El Photo Mode es moneda corriente; los juegos que bloquean la habilidad de grabar o capturar imágenes suelen ser mal vistos; el hashtag #PS4Share es una constante en las redes sociales; consolas más nuevas como la Nintendo Switch incluso tienen botones específicos para usar estas herramientas. Me resulta imposible imaginar la escena del gaming sin el fácil acceso a la función de compartir imágenes y videos.
Siempre se puede seguir mejorando, y espero que con la nueva generación haya detalles mejor pulidos que hagan el proceso todavía más fácil. Lo seguro es que ya no hay vuelta atrás, pero al menos este fue uno de esos cambios de paradigma que me alegra recibir con los brazos bien abiertos. Herramientas más accesibles no perjudican a nadie, y nos benefician a todos.