No es raro que cuando una nueva entrega de una serie establecida decide hacer cambios radicales la gente tenga sentimientos encontrados. Guilty Gear Strive, el nuevo título de la legendaria serie de juegos de pelea de Arc System Works, fue polémico desde el momento en el que se mostró su jugabilidad por primera vez justamente por lo diferente que es. El año pasado hubo una beta cerrada para poder probar el juego y no exagero al decir que fue una de las betas más desastrosas de Arc System Works, a tal punto que muchos dudaron sobre la calidad del juego en sí. Este fin de semana tuvo lugar una nueva beta abierta, y el panorama cambió bastante.
A diferencia de aquella primera beta cerrada, esta nueva beta es prácticamente lo más parecido a lo que será la versión final del juego, ya que Guilty Gear Strive saldrá a principios de abril. No queda mucho tiempo para que Arc System Works haga cambios severos al juego, y lo único que seguro será diferente es el balance en sí de los personajes. Gracias a eso, es mucho más fácil tener una idea general de lo que Guilty Gear Strive será al momento de su lanzamiento, y esta beta puede dividirse muy fácilmente entre lo bueno, lo malo y lo que todavía deja varias dudas.
Empezando con lo positivo, esta beta de Guilty Gear Strive fue la mejor experiencia que tuve jugando juegos de pelea online en todos mis años como fan del género, más allá de los problemas de servidores del primer día de la beta. El año pasado fue terrible para los juegos de pelea ya que eliminó la posibilidad de competiciones offline. Esto, a su vez, desenmascaró al género entero y dejó en evidencia que son muy pocos los juegos que tienen una infraestructura online realmente buena. Sin entrar en detalles técnicos, Guilty Gear Strive finalmente marca el inicio de Arc System Works adoptando estos sistemas online y sin dudas este juego tiene la mejor implementación de ese tipo de infraestructura.
Cualquiera que haya jugado algún título de Arc System Works online sabe que la experiencia deja mucho que desear. Una conexión, por ejemplo, desde la zona oeste a la zona sur del Gran Buenos Aires puede tener bajones y problemas de delay frustrantes. En Guilty Gear Strive, una conexión desde Argentina hasta Canadá, en el otro extremo del mundo, se siente como si estuviese con esa persona al lado mio. Otros juegos con sistemas online similares intentaron llegar a esos resultados con quizás menor éxito, pero Guilty Gear Strive es realmente increíble en este sentido, al punto que no sería raro que lidere el futuro del género en cuanto a calidad de conexiones online.
Lamentablemente no todo es color de rosa, y a ese paso hacia adelante que dio Arc System Works lo precede un enorme paso hacia atrás representado por el sistema de lobby online. Mientras que la calidad de las partidas es la mejor que probé en un juego de peleas, el proceso de llegar a esa partida es el peor. Los lobbies de Guilty Gear Strive no son nada nuevo; esta involución de lo que Arc System Works empezó con juegos como Blazblue Chrono Phantasma y Persona 4 Arena Ultimax es realmente increíble, en el mal sentido. Más allá de esa pésima estética que parece una parodia de Habbo y no cuadra en absoluto con el estilo de Guilty Gear, la navegación del lobby es un desastre de proporciones realmente inmensas.
El sistema en sí no es demasiado diferente a la beta anterior: tu avatar en el lobby necesita desenfundar su arma para indicar que estás buscando una pelea. Sin embargo, usar estos lobbies sigue siendo casi tan malo como en aquella primera beta. A veces, vaya uno a saber por qué motivo, el juego trae errores que hacen que dejes de buscar partida o decide que no podés conectarte con otro jugador que también está buscando peleas. Si por accidente intentás mirar el perfil de algún jugador, te quedás atascado en una pantalla de carga durante minutos. Ni siquiera existe matchmaking tradicional; cuando uno comienza a buscar partida lo que el juego hace es poner tu avatar en un lobby con su arma en mano, por lo que dependés de que otro jugador te encuentre y quiera iniciar una partida. Es un total disparate que lamentablemente no va a cambiar de acá al lanzamiento y realmente le juega muy en contra a la experiencia.
Si bien todo lo que rodea la experiencia online abarca los dos extremos de lo positivo y lo negativo, el resto del paquete es lo que por ahora deja más dudas que respuestas. Guilty Gear es tradicionalmente considerada como una serie difícil de juegos de pelea, y Arc System Works pasó los últimos años haciendo juegos cada vez más accesibles para el jugador novato. Guilty Gear Strive busca continuar con esa tónica, pero algunas de las decisiones que el juego toma tienen el efecto opuesto. Desde el vamos, si el tutorial de esta beta es el tutorial que estará presente en el producto final, entonces Guilty Gear Strive tendrá el peor tutorial de un juego de Arc System Works en más de 10 años. Ese primer paso ya juega en contra para los novatos.
Otras de las decisiones que afectan la accesibilidad del juego tienen más que ver con la jugabilidad en sí, y esas son quizás las más difíciles de entender. Guilty Gear y otros juegos de estilo anime se suelen caracterizar por tener combos largos, algo que es criticado por unos y amado por otros. Guilty Gear Strive, en un intento de reducir la cantidad de combos que un jugador novato necesita aprender, limita enormemente la cantidad de combos fáciles que existen en el juego. Lo que tal vez no tuvieron en cuenta, es que al primer día de la beta los jugadores avanzados descubrieron varios combos que hacen que las peleas terminen en segundos, pero la gran mayoría de ellos requieren ejecución que un jugador novato simplemente no tiene al principio.
Esta beta de Guilty Gear Strive terminó siendo una tierra de contrastes. La experiencia online fue a la vez un desastre y una bendición, con conexiones excelentes entre jugadores de todo el mundo pero envueltas en un sistema de lobbies que realmente le quitan a uno las ganas de jugar. El anhelo del juego por ser accesible para novatos es invalidado por la inmediata profundidad que se requiere para ser bueno peleando. Quedará ver qué de todo esto puede cambiar de acá a abril, pero por más que el juego sea divertido para alguien como yo que tiene experiencia en la serie y que las conexiones sean perfectas, todavía queda en duda si Guilty Gear Strive terminará cumpliendo con todo lo que se propone. Solamente queda esperar.
