Si bien en esta industria uno está acostumbrado a la idea de que un juego relativamente popular seguramente recibirá una secuela, la realidad es que nada es seguro. Mucho menos cuando dicho juego se trataba de Splatoon, una idea bastante novedosa en cuanto a diseño para un juego multiplayer, pero que era un juego disponible únicamente en la infame consola Wii U. Así fue que mucha gente, entre la que me incluyo, solo veía Splatoon de lejos, preguntándose si alguna vez podría probar esa dosis de estilo y actitud que el juego mostraba tener pero que se sentía tan lejano por la plataforma en la que se encontraba. Por suerte, con la llegada de la Nintendo Switch, Splatoon 2 se convirtió en una realidad, y este gran juego hoy cumple cinco años.
Dadas las circunstancias de su predecesor, Splatoon 2 es un juego con un contexto bastante curioso. El Splatoon original fue un éxito rotundo, rompiendo récords de ventas en Europa y en Japón, al mismo tiempo que era coronado por la crítica como uno de los mejores juegos modernos de Nintendo. Sin embargo, un juego solamente puede ser tan exitoso como la plataforma en la que se puede jugar, y ahí es donde venía el mayor problema de aquel primer Splatoon. La Wii U simplemente no era una consola popular, y por más que el juego se vendía como pan caliente, ese hecho no iba a cambiar. Aquellos que no teníamos una Wii U no íbamos a comprar una consola nueva solamente para probar un juego multiplayer, por más que sea un excelente título.
Es un poco por eso que Splatoon 2 fue un fenómeno todavía mayor. La consola esta vez era la inmensamente popular Nintendo Switch, y gracias a esto el juego vendió casi el triple que su predecesor. Splatoon 2 venía a traer todas las bondades del original a manos de muchísimas más personas, algo que indudablemente es una necesidad para juegos multiplayer. Si bien para algunos este juego se sentía más como Splatoon 1.5 que como una verdadera secuela, la realidad es que para la gran mayoría eso no importaba, por el simple hecho de que una enorme cantidad de gente nunca había jugado ese primer Splatoon. Esta secuela fue el primer contacto para muchos con el universo de este juego, y por lo tanto no había un punto de comparación razonable.
Splatoon 2, entonces, llegó a manos de millones de personas que terminaron amando casi todo lo que el juego tenía para ofrecer. La campaña single-player es uno de los aspectos más aplaudidos, al saber utilizar las mecánicas únicas de este shooter en tercera persona para construir niveles que realmente se sienten con ese toque de Nintendo. Mientras tanto, el multiplayer ofrecía modos adictivos que hacían brillar las ideas de Splatoon y el énfasis que el juego pone en el control del territorio por sobre simplemente eliminar a los jugadores rivales. Todo eso estaba envuelto en un paquete con un estilo increíble, altamente inspirado por la moda urbana y moderna, y una comunidad llena de gente de todos los caminos de la vida, y que siempre se notaba dispuesta a recibir a quien sea con los brazos abiertos.
Sin embargo, no todo era color de rosa para Splatoon 2. Al igual que su predecesor, este juego demuestra que Nintendo todavía no tiene mucha idea sobre cómo funcionan los juegos online. Splatoon 2 fue uno de los juegos más ligados a Nintendo Switch Online, ese sistema que obliga a uno a pagar para poder jugar títulos multiplayer en la consola. Esto no existía cuando Splatoon 2 salió a la venta, por lo que a muchos les pareció una pésima movida el tener que pagar por algo que antes disfrutaban sin costo. Como si eso fuera poco, Splatoon 2 tampoco contaba con chat de voz, algo que Nintendo decidió implementar con una aplicación para celulares en otra terrible decisión. Una vez que uno estaba en medio del juego, estas cosas eran fáciles de ignorar, pero todos estos problemas dejaban en evidencia lo cabeza dura que puede llegar a ser Nintendo como compañía.
Estos defectos de Splatoon 2 no son algo menor, especialmente considerando que Splatoon 3 está a menos de dos meses de salir a la venta. Entre Splatoon y Splatoon 2 hubo solamente dos años en el medio, pero Splatoon 2 es un juego que ya tiene cinco años. El gaming en general está en un lugar bastante diferente, y todavía más cuando se trata de juegos multiplayer. La idea de un shooter sin un Battle Pass es una rareza, y es indudable la influencia que tuvieron los Battle Royale y los denominados “hero shooters” en el género. Asimismo, la gente en general ya tiene otras expectativas, y un juego con los problemas de Splatoon 2 hoy en día sería mucho más criticado. Nintendo tiene que demostrar que aprendió de los errores de este juego para que Splatoon 3 sea un éxito todavía más grande.
Más allá de lo que le depara el futuro a la serie, Splatoon 2 sin dudas fue un juego como ningún otro. Por más parecido que pueda llegar a ser al Splatoon original, su viaje de “juego atrapado en una consola que no se vende” a “juego estrella de una consola que no para de vender” lo convirtió en un título emblemático de la era moderna de Nintendo. Al combinar el éxito de la Switch con su estilo fascinante y sus excelentes ideas en cuanto a jugabilidad, Splatoon 2 es un juego que todavía da que hablar. Cinco años más tarde será hora de dar paso a otra secuela, algo que allá por el 2015 cuando salió el primer Splatoon nadie realmente se imaginaba. Splatoon fue muestra de que Nintendo todavía tiene muy buenas nuevas ideas, y con Splatoon 2 la gente finalmente pudo dar cuenta de ello.