En noviembre de 2021 Emma Majo, una ex analista de Seguridad en Sony Interactive, presentó una demanda contra la empresa por discriminación y despido injustificado, que Sony pidió que se desestime por falta de pruebas.
Pero esta semana los abogados de Majo sumaron los testimonios de siete ex-empleadas de PlayStation, en los que relatan experiencias de sexismo en diferentes oficinas en los Estados Unidos, según reportó el portal Axios.
Los testimonios incluyen el desprecio por sus ideas o propuestas, hostigamiento a las mujeres maternando y un techo de cristal dentro de la estructura corporativa, entre otros.
Una de las más vocales fue Marie Harrington, una ex directiva de Sony Interactive que dejó la compañía en 2019 a causa del “sexismo sistemático contra las empleadas”, que incluía “sesiones de calibración” en la que la empresa realizaba evaluaciones de desempeño y minimizaban el aporte de las mujeres frente a sus colegas hombres.
Según Harrington era común que los hombres calificaran a las empleadas de acuerdo a su atractivo físico e hicieran circular chistes subidos de tono e imágenes de tono. Además recordó una situación particular en la que uno de los ingenieros le pidió que no usara polleras porque “lo distraía”.
Finalmente contó que en 2005, después de dar a luz a mellizos, la empresa le ofreció “un depósito sin traba en la puerta que daba directamente a la entrada” para que usara como espacio de lactancia, por lo que decidió dejar de amamantar, dado que “no era posible en esas condiciones”.
Kara Jonson, por su parte dejó la compañía en 2021 pero antes escribió un carta abierta al grupo de mujeres de la empresa diciendo que por lo menos una decena de compañeras habían abandonado las oficinas en sólo cuatro meses.
Otra empleada que decidió no identificarse aseguró que antes de dejar las oficinas de San Mateo y San Francisco trabajaba directamente con cuatro otras mujeres, y todas ellas terminaron dejando la empresa “por razones similares relacionadas con discriminación sexual, acoso sexual y la imposibilidad de recibir un ascenso”.
“Un gerente se estaba acercando inapropiadamente a mí”, dijo una de las mujeres. “Me abrazó y me susurró al oído. Salí y fui al baño y le dije a algunas compañeras de trabajo. Poco después fue transferida de departamento”.
Sony no respondió a los pedidos de comentarios, pero parece que va a tener difícil desestimar la demanda con estas nuevas pruebas.