Aunque la Switch todavía no llegó a su cuarto año de vida, desde hace meses se especula con cuándo Nintendo lanzará una actualización del hardware. El híbrido cambió el paradigma tradicional del ciclo de consolas, y según varios analistas es un cambio que podría haber llegado para quedarse.
En diálogo con Bloomberg, uno de ellos dijo que la Switch podría ser la última consola de Nintendo, que cada varios años se renovaría con una versión superior, imitando el modelo de negocio de los fabricantes de celulares. Esto le permitiría no “reiniciar” el ciclo cada cinco o seis años como sucede tradicionalmente, sino mantener la base instalada de usuarios.
“Con cada generación de consolas la base instalada vuelve a cero y sus ganancias esencialmente vuelven a cero”, dijo Toan Tran, de la firma de inversión 10 West Advisors. “Pueden tener una base instalada contínua de unas 100 millones de consolas que simplemente avanza en el tiempo”.
Ryan O’ Connor, de la consultora Crossroad Capital, se la jugó y dijo que Switch es una plataforma que podría durar por siempre.
“Nintendo ha estado trabajando para eliminar la volatilidad cíclica creando una plataforma de consola que podría durar por siempre. Eso significa que su activo más valioso, la base de usuarios, nunca tiene que volver a cero como sucedía cada cinco o seis años en el pasado”.
Crossroad Capital dijo que el primer indicio de que Nintendo volcará todos sus recursos a la consola llegó cuando en 2013 la empresa unificó las divisiones de consolas caseras y portátiles, y tiempo después, en 2018, en un evento con accionistas Nintendo dijo que pretendía extender la vida útil de la Switch más allá de los cinco o seis años tradicionales.
Se espera que la primera Switch Pro llegue en el primer trimestre del año próximo, a tiempo para el cuarto aniversario de la original.