Riot Games, el estudio desarrollador del gigante League of Legends, continúa bajo la mira y ahora se enfrenta una investigación del Departamento de Empleo y Vivienda Justa (DFEH por sus siglas en inglés) del estado de California como parte de la investigación de discriminación de género dentro de la compañía.
Riot Games está siendo acusada de “pago desigual, acoso sexual, abuso sexual, represalias y discriminación sexual en la elección y ascenso del personal” según un comunicado de prensa del DFEH, que ha solicitado toda la información de pagos a los empleados.
El año pasado dos empleadas demandaron al estudio por violar las leyes de pago igualitario y promover una cultura de trabajo sexista y un ambiente sexualmente hostil. La investigación del estado de California comenzó en octubre de 2018, pero de acuerdo al DFEH la empresa se ha negado a proveer la información necesaria para el análisis de las condiciones de pago igualitario.
El mes pasado más de 150 empleados marcharon a las puertas de las oficinas de Riot Games para protestar contra la cultura de trabajo sexista cuando el estudio anunció que obligaría a las empleadas demandantes a aceptar la mediación forzada —una de las cláusulas incluidas en su contrato de trabajo—. El estudio se mantuvo firme en su postura y aseguró que aunque modificará la política a futuro la situación de las actuales demandantes no cambiará.
“Cuando los litigios en curso se resuelvan, les daremos a los nuevos Rioters [como se conoce a los empleados de la empresa] la opción de evitar la mediación forzada en casos individuales de acoso o abuso sexual,” dijo la empresa.
Dado que Riot Games se rehúsa a cooperar, el DFEH solicitó a la corte que obligar al estudio al liberar la documentación: “Cuando las compañías no cooperen voluntariamente con nuestras investigaciones, incluyendo nuestros descubrimientos, el DFEH ejecutará su derecho de solicitar asistencia de la corte. Hacerlo asegura que nuestras investigaciones sean informadas por evidencia relevante y completadas sin retrasos innecesarios.”
La empresa se defiende diciendo que ha cooperado y ha provisto al departamento “varios miles de líneas” de información de pago de los empleados. En un comunicado enviado al portal Kotaku, los portavoces aseguran que ha mantenido “activas conversaciones con el DFEH desde que comenzó su investigación.”
“Durante este tiempo hemos respondido a los pedidos del DFEH y hemos entregado más de 2500 páginas de documentos y varios miles de línea de datos de pagos. También hemos solicitado varias veces que el DFEH participe en una charla con nosotros para hablar de sus peticiones. A la fecha, esas solicitudes no han sido respondidas y estamos decepcionados al ver que el DFEH lanzó un comunicado de prensa diciendo que no hemos cooperado.”