Una de las grandes sorpresas de The Game Awards fue la revelación de Atlas, el nuevo juego de Grapeshot Games, el estudio responsable del exitoso Ark: Survival Evolved. Por desgracia el mundo de piratas y fantasía que prometía Atlas resultó ser una experiencia plagada de bugs, lag y que se parece muy poco al trailer de presentación.
Los problemas comenzaron hace dos semanas, cuando a días de su lanzamiento el 13 de diciembre se anunció que el juego se retrasaría primero al 19 y luego al 21 de este mes. Sorprendentemente miles de jugadores decidieron hacer una vigilia el jueves 20 y Atlas se convirtió así en uno de los juegos más vistos de Twitch, con más de treinta mil usuarios esperando junto a un grupo de streamers el lanzamiento del juego que se hacía desear. Sin embargo a último momento el juego volvió a retrasarse, dejando a miles de jugadores expectantes.
La comunidad le cayó duro al estudio, por lo que ese mismo día se anunció un “Streamer Branch”, que habilitaría un número limitado de servidores a streamers e influencers. La estrategia funcionó porque ese mismo día Atlas fue el juego más visto de Twitch, con más de 230 mil espectadores.
Eventualmente el juego fue lanzado y la desastrosa comunicación del estudio durante los días previos fue abordada por Jatheish Karunakaran, el community manager y productor de Grapeshot Games en un comunicado.
“Sé que nuestra comunicación (o falta de) es una porquería en estos momentos. Todos en el estudio están trabajando dura para lanzar Atlas y que podamos darles la mejor experiencia cuando el juego finalmente esté disponible en Early Access,” escribió. “La emoción que sienten por el proyecto no es inventada. Atlas tiene el potencial de ser el GOTA (Greatest of all time). Creo en este equipo y creo en este proyecto”.
Sin embargo, por más que Jat crea en el proyecto, más que en Early Access el juego parece estar en un estado de beta y prueba de servidores. El fin de semana que pasó ha sido todavía peor, con jugadores encontrando bugs, enfrentando lag y decepcionandose con una aventura que no se parece en nada a la experiencia prometida.
Atlas continúa entre los juegos más vistos de Twitch, con más de ochenta mil espectadores al momento de escribir esta nota. Pero muchos de los compradores se sintieron estafados por las promesas de Grapeshot Games y lo han hecho saber a través de los análisis de Steam, que alegan serios problemas de diseño y servidores colapsados que los obligan a pasar el 90 por ciento del tiempo viendo pantallas de carga — afectando la posibilidad de un reembolso, ya que Steam no otorga devoluciones a quienes hubieran jugado más de dos horas del juego.
Atlas es un proyecto ambicioso. El estudio asegura que los servidores podrán contener hasta cuarenta mil jugadores para poblar su enorme mundo, pero los usuarios aseguran que esos números no son realistas. Un vistazo en Steam Charts confirma que durante los últimos dos días el juego ha tenido un promedio de 35 mil jugadores (con un pico de 46 mil), dándole fundamento a los reclamos de los jugadores (a menos que el juego haya sido lanzado con un único servidor disponible, algo inviable… ¿o no?).
También sucede, según testimonios, que el juego es casi imposible de jugar en solitario, porque todos las islas ya han sido reclamadas por los grupos de jugadores más grandes. Aparentemente reclamar una isla toma diez minutos, pero “robarla” es un proceso que puede durar dos horas. Esto significa que los grandes grupos han tomado varias locaciones y se mueven entre ellas cuando algún jugador intenta hacerlas propias. Y sin tierra es imposible avanzar en el juego.
Como se ve en uno de los videos que ilustra esta nota, la realidad y las promesas de Atlas son muy diferentes. Por el momento habrá que mantenerse al margen y seguir la evolución del juego para ver si eventualmente vale la pena sumarse a la aventura. Respira Sea of Thieves.
