Una nostálgica mirada al futbol de barrio, desde los pies de unos pequeños ecuatorianos llenos de sueños e ilusiones.
El futbol es una pasión que recorre el mundo, pero siento que no estoy muy errado al pensar que, en Latino América, se vive de otra forma. Esa cosa del barrio, la plaza, el potrero, la calle, algo que los ecuatorianos Julián Cordero y Sebastián Valbuena plasman muy bien en este particular título llamado Despelote.
Haciendo un poco de autobiografía, los dos creadores de Despelote hacen referencia constantemente en el juego a su infancia, allá por 2001, cuando pasaban todo el día con la pelota en los pies, sin importar el momento o la situación. El juego se dispone a mostrar el impacto social del futbol en la ciudad de Quito, exponiendo el propio comportamiento y el ajeno, respecto a unos niños que, como ya dije, hacían todo con un balón siempre en sus pies.
Como detalle interesante, y más allá de su peculiar estilo visual, muchas referencias arquitectónicas y texturas que podemos apreciar en el juego, son realmente imágenes captadas de la vida real, al igual que el aspecto sonoro, que se grabó en aquellos lugares, al menos una gran parte de ellos.
El juego parece ser casi un viaje fantástico hacia el mundo de futbol bien de barrio a través de los ojos de unos niños que todavía tienen sus sueños a flor de piel. Despelote tiene planeado su lanzamiento recién para 2024, y va a salir para PlayStation 5, Xbox Series y PC.
