Netflix está apostando de lleno a las series juveniles, se nota que gran parte del público de la plataforma son adolescentes. De todas formas, esto no quita que se olviden del resto de sus televidentes y eso hace que la mayoría de sus propuestas del género teen drama tengan un dejo de oscuridad. The Society es justamente eso, una serie que está lejos de ser adulta, pero que tiene una premisa que puede captar audiencias más maduras y un planteo genuinamente pesimista, raro de ver en las series para adolescentes.
Cuando reseñamos el primer episodio, no sabíamos mucho para qué lado iba a despegar. Lo cierto es que, como no nos cansamos de decir los que reseñamos series en Malditos Nerds, Netflix apuesta por un formato que asemeja sus series a películas estiradas. Tal es así que The Society tarda dos capítulos enteros en definir sus personajes y en darle un rumbo a la historia. Son casi dos horas de metraje y no culparía a nadie que las abandone a la mitad.
The Society es la nueva serie de Christopher Keyser, creador de la memorable Party of Five. Inesperadamente, Keyser trae una serie bastante más pobre en niveles de producción, con un estilo cinematográfico que no dice nada, una estética aburrida y un vestuario y elenco carentes de personalidad. Con el correr de los episodios, algunas caras resaltan y terminamos teniendo a los buenos y a los malos de esta película, y hay que reconocerle que algunos personajes no son tan de manual como esperaríamos, llegando incluso a sorprender.
Recordemos un poco de qué va The Society: un grupo de adolescentes se pierde de camino a una excursión escolar. Logran regresar a sus hogares solo para descubrir que nada es lo que era: los adultos desaparecieron. A partir de entonces llega el momento de las teorías. ¿Dónde están? ¿En un universo paralelo? ¿En un experimento? Los dos primeros episodios poco indagan en esto y por ello son los más aburridos también.
El punto de inflexión es la muerte de Cassandra (Rachel Keller), a quien creíamos la protagonista hasta el final del tercer capítulo. La escena es toda una sorpresa y verla morir en una etapa tan temprana no es una jugada corriente en dramas adolescentes. Es cierto que después de Game of Thrones, la movida de matar al protagonista no es nueva, pero es raro verla en una producción que apunta a una demografía joven.
Quien toma la batuta después es Allie (Kathryn Newton), hermana de la fallecida. Las situaciones que se desatan a veces son totalmente insufribles. Como a muchas originales de Netflix, le sobran minutos y hay planteos tan ridículos como un baile de graduación en pleno apocalipsis. El ritmo es equivalente al de una película que mejora y nos atrapa recién en el segundo acto.
Hay momentos genuinamente crueles, que le hacen honor al Señor de las Moscas y que dicen algo nuevo de lo que podría llegar a ser una sociedad dominada por adolescentes. La muerte de Dewey (Seth Meriwether) es un momento muy tenso; la relación entre Campbell (Toby Wallace) y Elle (Olivia DeJonge) da lugar a los momentos más impredecibles.
También suma puntos que aborde temas no tan comunes en los dramas adolescentes. Obvio que hay bullying y racismo, obvio que hay masculinidad tóxica, pero también se animan a abordar miedos más sociales, como el de la mujer en el poder y el de la pérdida de los privilegios, representado por Harry (Alex Fitzalan) el niño rico y popular que no supera tener que compartir sus riquezas con “la plebe”. También hay una crítica al uso de armas en USA, sin caer en un tiroteo.
The Society tiene varios planteos interesantes y un misterio atrapante que por desgracia no resuelve, así que tendremos que esperar a la segunda temporada. No está exenta de los males endémicos de los dramas de Netflix, es decir, problemas de ritmo y minutos que sobran; sin embargo, tiene sus sorpresas y eleva la vara en cuanto a dramas adolescentes de la plataforma.