ANÁLISIS | Someday You’ll Return: puzles y un bosque maldito

Juegos de terror en primera persona hay muchísimos, muchos más de los que nos gustaría y, lamentablemente, muchos de ellos son una experiencia clónica de un juego más grande. Amnesia, Outlast y P.T. son algunos de los más influyentes, que inspiraron a cientos de juegos, todos iguales. ¿Por qué les cuento esto? Porque Someday You’ll Return ya de por sí empieza con el pie derecho por no ser el típico juego de terror en primera persona. Sus desarrolladores, los checos de CBE Software, nos traen una experiencia a medio camino entre la aventura gráfica y los walking simulator que sorprende en varios sentidos. Veamos cuáles.

Someday You’ll Return nos pone en la piel de Daniel, un padre desesperado que se interna en un bosque, al que conoce muy bien, para buscar a Stela, su hija desaparecida. Ambientado en la propia República Checa, país natal del pequeño estudio que desarrolla este juego, el título nos meterá de lleno en un ambiente tan maravillo como aterrador. El bosque es un escenario de mundo abierto, no lineal, que podemos recorrer a nuestro antojo.

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Pocas aventuras de terror nos dan la libertad a la que se atreve Someday You’ll Return. Este es uno de sus mayores logros y, a su vez, una especie de talón de Aquiles. El hecho de que se trate de un juego que le suelta tanto la mano al jugador hace que no sea apto para todos. Está bien recibido por los amantes de las aventuras gráficas, específicamente quienes disfrutaron clásicos como Myst, The Lost Crown o aventuras de ritmo pausado como Scratches o Dark Fall. Estamos ante un título de nicho que por momentos pondrá a prueba nuestra pacencia pero que nos recompensará si no nos despegamos de él.

Por momentos también nos recuerda a The Forest, de Endnight Games, no solo por la ambientación compartida, sino también porque tiene elementos de supervivencia. Otras de las similitudes con The Forest es que familiarizarnos con Someday You’ll Return lleva su tiempo. Estamos ante una aventura de unas 15 horas que cruza varios géneros: la ambientación y la inmersión del terror más actual; los puzles y el diseño de las aventuras gráficas clásicas, sigilo y huidas de enemigos, y exploración atrapante, siempre en pos de contarnos una historia.

Daniel comenzará su búsqueda en las orillas del bosque para ir internándose en un mapa que nos sorprende constantemente. No tenemos una brújula o un marcador en pantalla que nos diga donde está nuestro objetivo. Nuestro único aliado será el teléfono celular del protagonista que tiene un sistema de geolocalización que marca los caminos principales del bosque, pero que no será suficiente para orientarnos del todo. Al estilo vieja escuela, deberemos guiarnos con los paneles turísticos que encontraremos en el entorno y otro tipo de carteles que nos ayudarán a entender dónde estamos y dónde tenemos que ir.

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Tendremos libertad de explorar a nuestro antojo, aunque en general los objetivos nos van guiando por las distintas zonas del bosque. En un momento nos toca explorar un campamento, la última ubicación donde sabemos que estuvo Stela. Ya de por sí es todo un enigma encontrar el campamento y una vez que estamos en el lugar, no vamos a tener que alejarnos mucho para resolver los puzles y entender qué hacer.

En este sentido, Someday You’ll Return sabe cómo hacer que su mundo abierto no nos desoriente. En general vamos a entender siempre qué tenemos que hacer y el desafío estará en entender cómo llegar a algún lugar o cómo resolver un puzzle. En el inventario nunca vamos a tener 10 objetos y cinco posibilidades de combinación o interacción para cada uno, es decir, nunca vamos a tener tantas posibilidades como para no saber qué hacer. Los desafíos son siempre lógicos también, así que vamos a disfrutar de un diseño de niveles y de puzles muy justo. La dificultad es elevada y muchos de los puzles probablemente nos obliguen a sacar lápiz y papel para anotar, algo que suena nostálgico y que nos sorprendió porque está bien hecho.

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Volviendo al celular de Daniel, el uso del dispositivo es una de las mecánicas más interesantes. Nos sirve de GPS, pero también se queda sin señal, así que, como dije más arriba, no podemos depender de él. También recibiremos llamadas y mensajes durante nuestra larga caminata por el bosque que aumentarán el drama y el suspenso. La búsqueda por Stela se hará más desesperante y en más de una ocasión vamos a tener que tomar una decisión en base a si responder un mensaje o no responderlo, y cómo responderlo; si atender una llamada, o no.

Por otro lado, mencioné que Someday You’ll Return tiene momentos de sigilo y estos son el punto más flojo del juego. El juego de CBE Software mete con calzador algunos momentos en los que debemos escondernos y escapar de monstruos. Comete el mismo error que SOMA u Observer: en sus ansias de seguir las tendencias actuales de los juegos de terror, recae en secuencias de sigilo repetitivas, scripteadas y lineales. Cuando toca lidiar con enemigos, el juego deja de ser abierto.

Para colmo, el sistema no está bien implementado y el protagonista no tiene métodos para distraer a los enemigos o para usar coberturas. Si nos escuchan o nos ven, estamos muertos de un golpe. La IA es tan castigadora que nos detecta muy fácilmente, de modo que todo el sigilo se reduce a prueba y error. ¿Aburrido? Sí, y frustrante.

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La implementación del sigilo fue muy criticada por lo que CBE Software lanzó una actualización para que Someday You’ll Return solucione el problema haciendo del sigilo algo opcional. ¿Cómo? Tomándonos una poción, otra de las mecánicas inusuales del juego.

Cuando avancemos un poco en la historia, Daniel sacará a relucir sus habilidades herbolarias con un kit de preparación de pociones. La mecánica puede sonar artificial, pero tiene todo el sentido cuando nos damos cuenta de que el bosque esconde un mística rara y parte de ella son las extrañas flores que encontraremos por doquier. Las pociones son variadas y nos ayudarán a sobrevivir. Hay una que nos quita el vértigo para no caernos cuando estemos explorando una zona en altura y una que nos permite evadir fácilmente a los enemigos

Para preparar estas pociones debemos recoger distintos tipos de plantas y combinarlas siguiendo las instrucciones de las recetas que vamos recibiendo al progresar en la historia. La verdad es que el juego es generoso con los recursos y no es difícil encontrar los ingredientes para preparar una poción, aunque siempre tenemos que estar pendientes de que el sistema de pociones existe porque si nos acordamos a último momento de que nos serviría tomar una poción, puede que los ingredientes no estén a la mano todo el tiempo, en especial cuando estamos explorando escenarios cerrados donde no hay vegetación.

En cuanto a historia, el juego nos atrapa. La búsqueda de una hija desaparecida es una premisa muy común, pero los sucesos se desenvuelven de una forma que convence y escapa muy bien de los chiclés. Someday You’ll Return es un juego muy narrativo. Siempre vamos a estar encontrando nuevas pistas, vamos a toparnos con personajes misteriosos y aprender más del trasfondo del lugar leyendo documentos y prestando atención al entorno. Los espacios y el bosque en sí mismo tienen su propia historia.

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Someday You’ll Return nos deja buenas impresiones en general, aunque tiene algunos problemas que no podemos dejar pasar. Con la última actualización se resolvió el problema del sigilo y agradezco haber esperado una semana para empezar a jugar porque hicieron falta varios parches para mejorar su rendimiento también. Sin embargo, todavía persiste el problema del ritmo. Es raro criticar esto, pero la verdad es que estamos frente a un juego que es demasiado largo. O más bien, se siente largo. La historia nos mantiene atrapados todo el tiempo, pero vamos a desear que sea un juego menos vueltero; vamos a pedirle que deje de repetir los encuentros con monstruos.

Hay varias horas de contenido que están de más y hay momentos que pierden fuerza. Por suerte la historia nunca deja de ser convincente. Daniel como personaje no es el típico “héroe”, como podría ser Harry Mason en busca de Cheryl en Silent Hill. Por el contrario, el juego busca que lo odiemos y lo consigue. Al final lo que tenemos es una historia aterradora y emotiva por igual.

También quiero mencionar que el juego tiene objetivos secundarios y coleccionables, así que, si queremos, la duración se puede estirar hasta las 20 horas. Hay varios finales que nos hacen sentir que nuestras decisiones y modos de jugar tienen peso. Aunque, como el juego se siente largo, una vez que lo terminemos, no lo vamos a querer rejugar, al menos no enseguida.

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A nivel técnico es un juego que funciona bien. Visualmente es una maravilla y el nivel de detalle que tiene el bosque nos deja maravillados, especialmente si tenemos en cuenta que CBE Software es un estudio compuesto por tres desarrolladores. La optimización podría estar mejor, hay tirones y bajones de frames, aunque nada que mate la experiencia. El voice acting es amateur y lamentablemente no está a la altura del resto de los apartados.

Someday You’ll Return es un juego increíble en concepto con algunos deslices que empañan la experiencia. No la arruinan, claro, pero no le permiten ser la gran aventura que quiere ser. De todas formas, consigue ser un ejemplar recomendable y, sobre todo, uno distinto: una bocanada de aire fresco en el género del terror en primera persona. No es un juego para todos, pero sí tiene un público que estará dispuesto a perderse en su frondoso bosque, con sus virtudes y sus falencias.

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SOMEDAY YOU’LL RETURN

05/05/2020 (PC)
7.5

Jugué Someday You’ll Return por más de 15 horas en PC y, a pesar de los altibajos que no podemos obviar, el juego me encantó. Desde que salió hasta ahora, recibió varios parches que arreglaron los problemas que le merecieron las malas críticas que obtuvo en la primera semana de lanzamiento. Una muestra clara de que, a veces, los juegos no están realmente lanzados hasta un tiempo después de la fecha inicial. CBE Software no dejó de escuchar a los fans y hoy en día tenemos un producto recomendable.