ANÁLISIS | Death Trash: la mezcla entre Fallout y Lovecraft

En los últimos tiempos, podemos encontrar en los juegos independientes aquellas nuevas experiencias que tratan de plantear algo realmente interesante dentro del ambiente. Nunca se me hubiese podido ocurrir la idea de un mundo infectado de carne de dudosa procedencia, entre varias otras ideas muy bien implementadas tanto artísticas y de diseño, como en Death Trash: un rpg de acción post apocalíptico con una onda muy punk pero siempre haciendo hincapié en que vas a disponer de una libertad que otros juegos no te van a poder ofrecer.

El estudio independiente Crafting Legends viene hace más de 5 años desarrollando este juego, mezclando varios géneros y encontrando el balance entre todos ellos.

Death Trash trailer | PC Gaming Show E3 2021

Arrancando en un laboratorio, del cual vamos a intentar salir, Death Trash nos muestra cómo va a ser la manera de ser jugado y el enfoque de la narrativa que va a tener durante poco más de 6 hs que vamos a poder jugar. Lo primero que llama la atención es el creador del personaje porque además de elegir el aspecto físico que tendrá nuestro personajes también nos va a dar la posibilidad de ya poder asignar una serie de puntos a los distintos atributos como fuerza o empatía para poder arrancar con una ventaja o asignarlos una vez que ya hayamos comenzado la partida.

La historia principal se centra en primera instancia en tratar de conseguirle amigos a un Kraken de carne que está atrapado dentro de una cueva, con quien vamos a hablar para saber qué es lo que busca o quiere para así más tarde pedirle ayuda nosotros para entender lo que sucede a nuestro alrededor y por qué el mundo está infectado con esas protuberancias y gusanos de carne. A medida que avanzamos, diferentes personajes nos van contando de la existencia de Titanes y que para entender al mundo en el que vivimos tenemos que hablar con ellos. La manera en la que tiene de ser contada esta historia, de ir enterándonos a medida que hablamos con distintos NPCs, que mezcla con algunos toques de humor en ciertas ocasiones hace que sea muy disfrutable tratar de averiguar y de leer todas las notas que vayamos encontrando, para descubrir un culto a estas criaturas y otros seres que va infectando a las personas que se encuentren en contacto con esta carne que brota de la tierra y, además, tener que elegir los diálogos para entablar una relación con los demás y que dependiendo de nuestro nivel de carisma es la reacción o influencia que tengamos del otro con quien hablemos lo vuelven muy intrigante para cualquier amante de los RPG.

screenshot_2021-04-26_11-19-51.png

La jugabilidad es muy a la vieja escuela de los RPG, donde casi todo se puede hacer tranquilamente con el mouse sin necesidad de tocar el teclado en ningún momento sin llegar a ser un point and click, pero además es muy fácil entender qué es lo que estamos haciendo y quienes son nuestros enemigos que la gran mayoría de las veces son criaturas casi zombies con distintos tipos de ataque o que explotan cuando los matas como también miembros pertenecientes a una pandilla que al mínimo contacto visual te van a disparar y perseguir por todo el mapa. Entender el sistema de atributos es muy sencillo, cada punto que agreguemos se va a ver reflejado inmediatamente en algo en particular como más facilidad para abrir puertas o robar, más posibilidad de interacción con diferentes personajes, la posibilidad de poder equiparnos mejoras de mejor calidad, hacer más daño con armas melé o a distancia y, obviamente, tener más salud o más energía. El sistema de puntos para asignar se divide en dos partes, como Divinity, donde por un lado mejoramos los atributos principales como la vida, en el otro mejoramos la especialización de nuestro personaje como por ejemplo que haga más daño con un cierto tipo de arma o que sea más rápido en destrabar objetos. Es muy sencillo en ese aspecto Death Trash, como también lo es al momento de equipar los diferentes objetos que vayamos consiguiendo, ya sea comprados o por completar tareas, teniendo objetos para el cuerpo, para la cabeza y para la mente que son los pocos recuerdos que vayamos consiguiendo o enseñanzas como el idioma para hablar con la carne que nos enseña el Kraken.

El sistema de disparos y el uso de armas no son de los mejores realmente, poca es la diferencia entre las armas a distancia salvo por la cadencia de tiro o cantidad de balas en el cargador, de la misma manera sucede con las armas melé donde se diferencian por su velocidad de ataque siendo el daño casi el mismo entre todas las armas sean espadas o mazos. No es un punto negativo ni mucho menos, pero si me gusta sentir una diferencia al momento de cambiar el equipamiento sobre todo cuando me acechan una buena cantidad de enemigos. Si es para destacar la facilidad para cambiar el equipamiento sin necesidad de entrar al inventario todo el tiempo, porque tenemos un menú exclusivo con los objetos usables que tengamos guardados al igual que las habilidades activables.

ss_30b47bcdc5cba731e2d1656eb34bca573a78d82e.1920×1080.jpg

Poder craftear distintos objetos como ganzúas, balas, balizas de distracción entre otros objetos ayuda mucho a no tener que volver hasta algún mercader para comprar esos objetos, o mismo para que en el medio de una situación comprometida no nos quedemos sin balas. Una gran decisión para no cortar el juego y para no hacerse problema por falta de dinero para comprar esos objetos. Además, aunque no lo usemos muchas veces, tenemos la habilidad de sigilo para poder pasar desapercibido entre las criaturas que nos quieran matar, teniendo la libertad para poder elegir si enfrentarse y matar a mansalva o tratar de escondernos e ir muy despacio sin llamar la atención.

El arte y el diseño de las ciudades en Death Trash es de lo mejor que tiene, es hermoso cómo se ve y cómo te hace sentir lo grotesco de los pedazos de carne, además de ciertas situaciones un poco gore como lagos de sangre que hacen a la ambientación del juego. Estas contrastan perfectamente con el laboratorio o bunkers donde tenemos que meternos para poder robar partes de máquinas o registros de algunas computadoras, eso sí los generadores de electricidad funcionan con materia orgánica pero no hace falta más que vomitarle al tanque de combustible para llenarlo y que arranque. Por si quedaba alguna duda, vomitar en Death Trash es una habilidad que tiene un cooldown para poder usarse.

ss_4476610050e4dfce4b294f1a5698ecc6d981e81d.1920×1080.jpg

Algo que si o si voy a mencionar es que aún está en early access, por lo tanto la duración de la historia, variaciones entre armas y demás, probablemente cambie con respecto a su salida que está estipulada para 2022, al igual que el agregado de más idiomas ya que solamente tiene inglés y alemán. De la misma manera que también pueden cambiar la ganancia de experiencia porque se siente que se gana muy poco para todo lo que estamos haciendo al igual que sentir que grindear no tiene mucho sentido porque la cantidad de puntos que nos dan las distintas criaturas que nos enfrentemos.

Death Trash es asquerosamente llamativo y hermoso con toda esa sangre, pedazos de carne dando vueltas por ahí, gente vomitando y titanes de carne. El arte, la jugabilidad sencilla y los distintos toques de humor que nos encontramos hacen que destaque por sobre el resto; es muy divertido jugarlo, como también verlo pero lo mejor es que entablamos una relación de amistad con un kraken de carne y eso no te lo ofrece ningún otro juego.

Embed

DEATH TRASH

05/08/2021 (PC, XONE, XSX, PS4, PS5, SWITCH)
8.5

Aunque corta, la experiencia con Death Trash es sumamente recomendable siempre que el inglés no sea una barrera para que puedas disfrutarlo. Probé la versión de PC (de Steam) y funcionó excelentemente bien. El código fue cedido por la distribuidora.