Y según el portal Bloomberg esa prueba y error no es barata. Un nuevo reporte de la empresa dice que Amazon gasta alrededor de 500 millones de dólares al año en su división de juegos, sin contar la inversión en Twitch y en Luna, su nuevo servicio de streaming.
El informe dice que el jefe de la división, Mike Frazzini, no tiene experiencia en el desarrollo de juegos, y toma sus decisiones a partir de estadísticas y no escuchando a los desarrolladores veteranos que contrata.
Entre los grandes nombres que han pasado o permanecen en la división se encuentran John Smedley, ex Sony Online Entertainment; Kim Swift, la creadora de Portal; Clint Hocking, director de Far Cry 2; y Christoph Hartmann, un veterano de Take-Two.
Además, de acuerdo a una nota de GamesIndustry realizada en base a entrevistas a más de 30 actuales y ex empleados, el motor gráfico Lumberyard de la compañía es un desastre y muy complejo para trabajar, y dentro de la división se cultiva una verdadera cultura machista, con jefes que tocan a sus empleados y mantienen conversaciones inapropiadas.
Amazon acaba de lanzar Luna, su alternativa a Stadia, pero continúa desarrollando juegos: New Worlds es un MMO en producción desde hace años que debía salir en agosto del año pasado pero fue retrasado, y hay otro juego masivo multijugador basado en El Señor de los Anillos que debería lanzarse junto con la serie de TV que la empresa está preparando para Prime Video.